Sobre tutores, orientadores, coachees e influencers

En la actividad propuesta en el aula el 18 de octubre de 2021, se nos pidió, en primer lugar, ver qué similitudes y diferencias existen entre las siguientes ocupaciones: tutor, orientador, asesor, coach e influencer.

Tutor, orientador, asesor, coach e influencer. ¿De qué estamos hablando?

Comenzando por el tutor, este se define como un profesor encargado de atender a los conflictos de orden pedagógico-educativo o personal (en la medida en que estos se trasladan al aula) de los alumnos. El campo de actuación de los tutores es muy variado, y por eso se confunde, en ocasiones, con el de otras figuras, como la del orientador escolar.

En sí misma, la palabra tutor es muy descriptiva. Los tutores son unas estructuras sólidas que se emplean en agricultura y jardinería, a fin de que las plantas crezcan rectamente. Esa vendría a ser la función esencial del tutor escolar. Para ello, trabajan temas diversos, que van desde la mediación en conflictos hasta la mejora de la autoestima personal. Las tutorías pueden trabajarse de forma individual o grupal con los alumnos.

Los asesores educativos son las personas encargadas de orientar al estudiante en el proceso de aprendizaje, y también en su desarrollo como persona individual y social. Una de sus funciones es acompañar al estudiante en el proceso de aprendizaje. Existen varios tipos de asesoría educativa, tales como la formativa o la investigadora. La asesoría se puede practicar, al igual que las tutorías, a nivel individual o grupal.

A diferencia de la tutoría, las asesorías grupales deben producirse en grupos pequeños. Además, pueden ser telemáticas, algo que no es muy común en las tutorías escolares, salvo circunstancias excepcionales, como las derivadas de la COVID-19.

El coaching se define, en teoría, como una metodología que consigue lograr, en un individuo concreto, el máximo desarrollo personal de los mismos. En el ámbito educativo, el coaching se basa en promover cambios de perspectiva y aumentar la motivación y el compromiso del alumno con los estudios, lo que redunda, finalmente, en las calificaciones.

El coaching se concreta, usualmente, en actividades individuales, centradas en un alumno, por lo que se diferencia de la tutoría en que esta atañe a toda la clase, y no solamente a un alumno. Además, el coaching no goza de buena fama en nuestros días, puesto que se suele relacionar con una charlatanería poco profunda, como bien evidencian los cómicos de Pantomima Full:


Por último, el término influencer ha ganado en popularidad en los últimos años. El término nació para referirse a aquellos creadores de contenido en Internet que, debido a sus experiencias con un producto concreto, se convertían en estrellas mediáticas que acababan trabajando para las marcas de las que eran consumidoras, influenciando así al público general. Por tanto, los influencer se identifican con el marketing, y cómo no, con la capacidad de condicionar a su público.

En cierto modo, podría decirse que un tutor es influencer, en la medida en que intenta influenciar a su grupo de referencia. Sin embargo, la influencia en Internet depende de factores que difícilmente pueden trasladarse al aula. Tengamos en cuenta que en una clase hay personas que no quieren estar ahí o que, dicho de otro modo, están ahí por obligación. Por tanto, es casi imposible conectar con ellas. Sin embargo, cuando esas personas consumen contenido online y siguen a sus propios influencers lo hacen liebremente, porque su contenido les agrada. Entonces, la cuestión es la siguiente: ¿Es posible hacer atractivo un currículum, que el profesor debe dar sí o sí, a personas que no quieren estar en clase?

A este listado de profesiones podría añadirse el entrenador personal, que ayuda a los deportistas a conseguir sus objetivos; el nutricionista; el psicólogo o el sacerdote. Todos ellos tienen como meta propiciar que la persona solvente sus problemas internos y alcance su mayor realización. Ahora bien, no todos lo hacen con la misma perspectiva. Salvo el sacerdote, que lo hace desde la religiosidad (y, por tanto, gratuidad, como el tutor), el resto lo hacen desde la motivación capitalista.

Ejemplo práctico: un falso itinerario educativo para K

Pongamos por ejemplo que una persona desconocida (a quien llamaremos K) me solicita ayuda porque se encuentra en una etapa difícil de su vida. Después de un paso difícil por el sistema educativo, que le llevó a repetir en dos ocasiones, K logró obtener su título de Bachillerato en Humanidades y Ciencias Sociales. 

Como no se veía preparado para cursar una carrera universitaria, K decidió acceder a un grado superior en Técnico en gestión administrativa. Aunque sus estudios se alargaron algo más de lo previsto (tres años en lugar de los dos en los que se podría cursar el grado), K logró un contrato de prácticas en una empresa local, encargada de la venta al pormayor. 

Cuando sus prácticas finalizaron, la empresa, que estaba contenta con su labor, decidió contratarle. Poco a poco pasó de los contratos trimestrales a los indefinidos. Cuando todo parecía perfecto, los efectos de la crisis económica por la COVID-19 obligaron a la empresa a realizar ERTE a sus trabajadores. K se vio sobrepasado por las circunstancias, y su empresa no salió adelante. 

Sin ningún trabajo y estudios "limitados", aunque con una experiencia de más de un año en venta al pormayor, acudió a mí para orientarle y conseguir un mejor futuro laboral.

Primero, le insté a que realizase cursos de formación que ofrecen los sindicatos a un módico precio, para completar su currículum. Entretanto, seleccionamos las empresas que más se parecían a la que había cerrado, y trabajamos en un nuevo currículum vitae para él.

Finalmente, K consiguió trabajo en una empresa
de venta de perfumes, con un gran volumen de 
negocio hacia el extranjero.
Una empresa de venta de perfumes se interesó en él y, agradados por su experiencia y la reciente formación que había adquirido, le contrataron. El sueldo era peor que aquel del que gozaba en su antigua empresa, pero le daban oportunidades de ascenso.

Con un sueldo asegurado, proyectamos objetivos más grandes: conseguir el nivel First de inglés y el A2 de alemán. La empresa ajustó su horario para que pudiera seguir con sus estudios, ya que estaban muy interesados en su formación (tengamos en cuenta que gran parte de los perfumes se venden en Centroeuropa y el Reino Unido). Así pues, sus perspectivas laborales mejoraron en gran medida.

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